Luego de un duro día de trabajo, se queda dormido. De pronto se despierta. Su corazón late a una velocidad estrepitosa, su cabeza se siente mareada y fuera de control, su respiración es corta e insuficiente, y tiene espasmos estomacales... si, está siendo víctima de ataques de pánico durante el sueño.
Si normalmente sufre ataques de pánico durante el día, hay una alta probabilidad de que también experimente ataques de pánico durante su sueño. Mientras que un ataque de pánico puede durar sólo de 10 a 15 minutos, los ataques de pánico durante el sueño pueden llegar a ser mucho más molestos. Ya que el sueño es el momento en el que su cuerpo y su mente reciben el descanso tan necesario, los ataques de pánico durante el sueño pueden representar una gran molestia en su curso natural.
Por ello, es imperativo que comprenda la gravedad de la situación. Asegúrese de no cometer el error de subestimar sus ataques de pánico durante el sueño como simples pesadillas, debido a que los ataques de pánico durante el sueño son un asunto mucho más serio que un mal sueño. Dicho esto, los ataques de pánico durante el sueño tampoco son el fin del mundo, ya que pueden ser controlados, y son simplemente el resultado de su ansiedad perpetua y su de excesiva preocupación.
Por ello es importante que si experimenta un ataque de pánico durante el sueño, busque ayuda inmediatamente por parte de un profesional médico, que podrá diseñar una estrategia que le ayudará a superar su problema de ansiedad.
Cuando acuda inicialmente a su doctor, el intentar a determinar si estos episodios nocturnos son de hecho ataques de pánico durante el sueño, o alguna enfermedad similar. Esto debido a que los síntomas exhibidos durante un ataque de pánico durante el sueño también pueden ser causados por apnea del sueño (una condición en la que no se recibe suficiente aire en los pulmones durante el sueño).
Si el doctor concluye que de hecho sufre de ataques de pánico durante el sueño, analizará su estilo de vida, por lo cual le puede pedir algunos cambios determinados. Estos cambios apuntan a que usted adapte hábitos que sean mejores para el sueño. Por ello, se le pedirá evitar el consumo de nicotina, cafeína, y de alcohol durante el día. Del mismo modo, también puede que le recomiende dejar de hacer ejercicios rigurosos antes del momento de ir a dormir. Todo esto puede representar un cambio mínimo para alguien, mientras que para otros puede tratarse de un cambio profundo en su rutina. Pero no todas las recomendaciones son desalentadoras. Después de todo, la mayoría de los profesionales médicos le recomendara tener sexo antes de ir a dormir, ya que las endorfinas producidas en su mente durante el acto sexual actúan como relajantes naturales. Otros relajantes naturales que podría tomar antes de ir a dormir incluyen una tasa de té de hierbas.
Además de estas modificaciones en su estilo de vida, quizás también necesite someterse a tratamiento para su ansiedad general. Esto podría significar que puede necesitar terapia conductual, en particular, terapia cognitivo conductual, la cual apunta a modificar primariamente sus patrones de pensamiento para poder modificar sus comportamientos. Este método puede tomar algún tiempo para demostrar resultados, aunque la investigación indica que la terapia cognitivo conductual puede funcionar de maravilla para las personas que sufren de ataques de pánico durante el sueño, así como también otros asuntos relacionados a la ansiedad.
Dependiendo de cada caso, en conjunto a la terapia cognitivo conductual, existen varias medicaciones que pueden ayudar a inducir el sueño. Recuerde que estas medicaciones pueden conformar hábitos, y pueden no ser la mejor solución ya que uno podría volverse dependiente de ellas para algo que debería ser totalmente natural. Por ello, asegúrese de utilizar la medicación para el sueño con mucha precaución.
En lugar de eso, intenté llevar un estilo de vida más saludable. Los ejercicios regulares durante el día pueden hacer mucho para minimizar la ansiedad, ya que permiten que varios músculos del cuerpo se relajen. Del mismo modo, se pueden utilizar variadas técnicas de relajación para contrarrestar el estrés y la ansiedad. Los ataques de pánico, durante el día o la noche, pueden ser controlados si así lo desea.